La digestión después de una colecistectomía (extirpación de la vesícula biliar) puede sentirse diferente… y no es tu imaginación. Algunos alimentos que antes tolerabas bien hoy podrían resultarte pesados. ¿La razón? Tu cuerpo ya no procesa las grasas de la misma manera.
¿Qué hace la vesícula y por qué afecta tu digestión?
La vesícula biliar es un pequeño órgano encargado de almacenar bilis, una sustancia producida por el hígado que ayuda a digerir las grasas.
Cuando se extrae (por ejemplo, por cálculos o infecciones), tu hígado sigue produciendo bilis, pero ya no hay un lugar donde almacenarla ni liberarla en cantidad cuando comes grasas.
Eso significa que:
Hay menos bilis disponible al momento de comer.
Las grasas (incluso las saludables) pueden caer pesadas o digerirse más lento.
Puedes experimentar hinchazón, malestar o digestión lenta tras ciertos alimentos.
¿Qué deberías evitar después de la cirugía?
- Frituras
- Alimentos ultraprocesados
- Comidas muy grasosas o muy condimentadas
En cambio, se recomienda incorporar:
- Aceite de oliva crudo (por ejemplo, en ensaladas)
- Frutas, verduras y fibra
- Comidas livianas, en porciones moderadas
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